My playlist


viernes, 1 de julio de 2011

Tengo 19 años.


Bueno.
Tengo 19 años y me acabo de dar cuenta de que los hombres no merecen la pena.
Tengo 19 años y me he dado cuenta que a veces te tiene que doler el corazón, pero solo a veces, no siempre como me pasa a mí.
Tengo 19 años y creo que cada vez que conozco a un chico y las cosas van bien llega algo que lo tuerce.

Siento que todo lo que hago es nulo. Quiero decir, yo intento que las cosas vayan bien, doy todo lo que puedo y más por algo que sé que no va a durar ni va a ser para siempre, pero creo que va a merecer la pena, aunque sea por un tiempo. Pero no.
No merece la pena nada.
No merece la pena luchar.
No merece la pena seguir intentando cosas que no van a ninguna parte.
No merece la pena darlo todo, porque al final no consigues nada.
Simplemente nada merece la pena.


Los humanos vivimos de ilusiones. Creemos que todo lo que queremos lo vamos a conseguir, pero algunas cosas se nos escapan de las manos.
No podemos conseguirlo todo por mucho que lo intentemos.
Y hay días en la vida, como hoy, que cuando algo o alguien te decepciona piensas que nada merece la pena y que tienes que dejar de intentar hacer las cosas.
A veces pienso que lo mejor que podría hacer sería ser como una amiga mía. No le importan los chicos, no le importa nada. Vive el momento. Yo vivo el momento, de verdad, pero hay algo que me impide que ese momento sea pleno.

En definitiva, parece que esto me guste. Que me guste sufrir, pasarlo mal, llorar por los chicos. Parece que tenga un radar para atraer a lo peor, para atraer a lo que me va a hacer daño.
Fito dijo:
Si no puede hacerte daño no te hará feliz.
Y puede que tenga razón, pero no lo sé. Porque a mí solo me hace daño, y cuando duele tengo tendencia a parar y sufrir en silencio, llorar un tiempo y acabar olvidándome. Y así SIEMPRE.









Quiero un chico que convierta mis lágrimas en sonrisas, que haga que salga el sol cuando tenga un día gris. Que me alimente con besos en vez de con disgustos. Que cada día sea una aventura nueva. Que cuando aparezcan problemas él me ayude a afrontarlos, que no deje que me absorban. Necesito alguien a quién entender y que me entienda. Que cuando lleve el pelo mal o tenga el día más feo del mundo me diga que soy bonita, que me quiere y que no se fijará nunca en nadie más.




No hay comentarios:

Publicar un comentario